Los mareos, vértigos o sensaciones de inestabilidad pueden llegar a afectar significativamente la calidad de vida. Aunque sus causas pueden ser variadas (desde alteraciones en el oído interno hasta problemas neurológicos o musculoesqueléticos), la zona cervical suele estar implicada con frecuencia, especialmente cuando hay tensión o restricción de movimiento. Eso, provoca un sobrecarga en el sistema nervioso, y a largo plazo, los mareos o inestabilidad.
Desde la quiropráctica, analizamos si los desequilibrios cervicales, en especial en las primeras vértebras del cuello, podrían estar interfiriendo en el sistema nervioso y contribuyendo a la aparición de estas molestias.
Aunque la quiropráctica no trata todas las causas del vértigo o del mareo, sí puede contribuir a mejorar el bienestar general al:
Trabajamos con ajustes suaves y específicos, adaptados a cada persona, siempre después de una valoración individual. En algunos casos, colaboramos con otros profesionales sanitarios (como médicos o fisioterapeutas), especialmente si se requiere un diagnóstico más específico.
Puedes considerar una valoración quiropráctica si notas:
Reserva tu primera consulta para valorar el estado de tu columna cervical y comprobar si el cuidado quiropráctico puede ayudarte a mejorar tu bienestar y tu sensación de equilibrio.